Hay que aceptarlo, no somos los de antes, el reconciliarnos una y mil veces creo que no es solución.Hay que aceptarlo perdona mi llanto me duele hasta el alma,pero nadie engaña a nuestro corazón. Porque el fuego lo apagamos con lágrimaS, porque en vez de dar más, dimos menos, por perdernos en orgullos absurdos, que no hacían mas que herirnos y amargarnos la vida.
Se ha ido el amor de descuido en descuido SIN DECIRNOS ADIÓS; nos hicimos la guerra, y perdimos los dos. Sé que es muy triste, nos invaden recuerdos. Mas hay que aceptarlo así es el destino a veces nos regala, a veces es un ladrón.